domingo, 19 de marzo de 2017

El banco

Siempre estuvo alli', silente y sombrio en aquel verde rincon. Ignorado por todos. Quizas solo la rama larga de un arbol cercano era la unica que habia reparado en el. 
Asi lo encontramos, y tomados de la mano nos refugiamos en el. Sobre su cuerpo nos sentamos a amarnos en secreto, a cruzar miles de palabras melosas, y tambien de temor. El banco solitario, olvidado, tenia nuestra presencia,  y era  observador de nuestras risas y llantos. Creo que al fin era feliz. N
osotros nos habiamos fijado en el. Su madera añosa y desteñida ya tenia una mision en aquella plaza de Hualpen.